Gabriel Silva, presidente de la Cemac, indicó que la situación es compleja y se registra un exceso en la oferta en relación a la baja demanda.

El sector de transportes de cargas se encuentra atravesando un momento complejo. Los altos costos en dólares agobian a las empresas que buscan mantener la rentabilidad y los mercados, en medio de la incertidumbre sobre lo que pasará económicamente en el mediano plazo.

Al respecto, se refirió Gabriel Silva, presidente de la Cámara de Empresarios Misioneros de Autotransporte de Cargas (Cemac) quien manifestó que “estamos complicados, la realidad del país no nos escapa a nosotros porque somos lo que movemos la producción del país de un lado a otro. No estamos exentos a lo que pasa”.

“Dependemos mucho de la actividad económica del país, tanto fabril como comercial. Y al estar todo parado, nuestros servicios son menos requeridos”, adujo en comunicación con el programa Acá te lo Contamos por Radioactiva 100.7. En ese sentido, indicó que el parate alcanza el 40%, aunque hay algunos rubros más afectados que otros.

“Esto genera un exceso de ofertas y camiones parados, lo que en otro momento no pasaba.  La construcción, por ejemplo, también cayó y eso repercute en nuestro flete. Ese 40% que cayó de kilómetros recorridos se vino de la mano con un 38% de aumentos en los costos. Vemos los ingresos recortados por la falta de actividad y a su vez, un aumento del combustible, salarios”, detalló Silva.

Afirmó además que desde las empresas se espera el ansiado rebote de la economía, pero de no producirse “varias entrarán en problemas financieros, al no poder pagar los gastos corrientes”.

“Nuestro insumos más importante es el combustible y venimos con subas mensuales del 4%, lo que no nos deja ver un horizonte iluminado.

Fuente: El Territorio