El Millonario superó a la Lepra por 4 a 1, con goles de Nicolás De la Cruz, Jorge Carrascal y Julián Álvarez en dos ocasiones, empatando circunstancialmente Ignacio Scocco, en el cierre de la undécima fecha de la LPF, y quedó más cerca de la punta.

River goleó por 4 a 1 a Newell's, en un gran partido jugado por la 11ma. fecha del Torneo de la Liga Profesional en el estadio Coloso Bielsa del Parque Independencia de Rosario.

Los goles "millonarios" fueron convertidos por Nicolás De La Cruz, en el primer tiempo y por Julián Álvarez, en dos ocasiones, y el colombiano Jorge Carrascal, en el segundo. Ignacio Scocco había empatado en el período inicial.

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River llegó a los 21 puntos y quedó tercero, a dos de los líderes Talleres de Córdoba y Lanús.

El equipo del DT Marcelo Gallardo jugó un gran segundo tiempo y ganó con justicia a partir de una noche mágica de Julián Álvarez, quien se erigió en la figura de la cancha con las asistencias en los tantos de De La Cruz y Carrascal y con sus dos golazos.

El partido no pudo haber comenzado mejor para River, que a los 4 minutos abrió el marcador con una gran jugada colectiva: Rojas recuperó en su defensa, tocó con Zuculini, que alargó con Enzo Pérez, quien habilitó a Álvarez por la izquierda del ataque y éste enganchó, pasó a Lema y dejó solo a De La Cruz por la derecha, quien cruzó un remate seco, que entró abajo, junto al segundo palo.

Lejos de amilanarse, Newell's siguió con su planteo de presión alta y disputa de la segunda pelota, al extremo que jugó casi todo el primer tiempo en el campo visitante, donde ganó casi todas las divididas o las segundas jugadas y remató una decena de veces al arco.

Así generó varias llegadas claras como las de los 7 minutos, cuando Fernández ubicó a Scocco, quien tocó de espaldas y dejó solo a Comba por el medio, que la punteó débil y Armani la controló en dos tiempos.

Y la llegada de los 11m., cuando Compagnucci llegó vació por la derecha, pero remató desviado.

River, que se vio sorprendido por la presión alta y asfixiante local, respondió' con una gran jugada de Carrascal, quien gambeteó a dos defensores por la derecha y mandó un centro que atajó Aguerre, ante la llegada de Romero.

Y, sobre todo, a los 15m. con un gran desborde de Angileri, quien mandó un centro fuerte que Bíttolo rechazó en el área chica, la pelota le rebotó a Romero y Carrascal la cabeceó muy cerca del ángulo izquierdo.

Newell's continuó con su presión alta y volvió a llegar a los 19m., con un disparo apenas alto de Pablo Pérez. Y a los 20m. con otro de Castro, salvado al córner por Paulo Díaz, de cabeza, y a los 25m., con una buena asistencia de Sordo a Comba por el medio, pero Armani volvió a salvar su valla.

Hasta que a los 35m., Newell's lo empató con el mismo libreto: Vigo hizo un lateral a Zuculini, Bittolo se la robó y asistió a Scocco, quien corrió libre de marcas hacia la derecha y clavó un remate abajo, junto al segundo palo. Otro golazo en la noche rosarina.

El complemento fue otro partido porque Gallardo acertó con los ingresos de Simón por Zuculini y de Rollheiser por Romero, con los que River se paró mejor en el medio, la recuperó, salió rápido en contraataque y logró una victoria inobjetable, a través de la jerarquía individual de Álvarez y Carrascal, que tuvieron tres definiciones exquisitas.

A los 15m. Comba cabeceó corto un centro desde la derecha, Angileri le pegó de zurda y Álvarez la paró de derecha con maestría y definió de zurda, en otro golazo.

El partido le quedó servido a River, que volvió a facturar a los 26m. con un tanto de antología: tocaron Álvarez, De La Cruz, Vigo, De La Cruz, Carrascal, Álvarez y Carrascal, quien la recibió solo por la izquierda y la picó de zurda, al segundo palo.

Y a los 31m., River colocó la frutilla del postre con una pared entre Álvarez y Palavecino, que la figura del encuentro definió con un derechazo al segundo palo, solo frente al arquero.

Así, Newell's tuvo una entrega encomiable y lo complicó en el primer tiempo hasta que River se paró mejor con los cambios y lo liquidó con tres golazos con el sello de calidad de sus jugadores, entre los que sobresalió la figura, Julián Álvarez, de 21 años y que recién había nacido la anterior vez que el "millonario" le metió cuatro goles a los "rojinegros" en esta cancha.

SÍNTESIS

Newell's: Alan Aguerre; Gabriel Compagnucci, Cristian Lema, Facundo Mansilla y Mariano Bíttolo; Pablo Pérez y Julián Fernández; Maximiliano Comba, Nicolás Castro y Ramiro Sordo; Ignacio Scocco. DT: Fernando Gamboa.

River: Franco Armani; Alex Vigo, Roberto Rojas, Paulo Díaz y Fabrizio Angileri; Nicolás De La Cruz, Enzo Pérez, Bruno Zuculini y Jorge Carrascal; Julián Álvarez y Braian Romero. DT: Marcelo Gallardo.

Goles en el primer tiempo: 4m. De la Cruz (RP); 35m. Scocco (N).

Goles en el segundo tiempo: 14m y 31m. Julián Álvarez (RP); 26m. Carrascal (RP).

Cambios en el segundo tiempo: antes del inicio, Jerónimo Cacciabúe por P. Pérez (N); 14m. Santiago Simón por Zuculini y Benjamín Rollheiser por Romero (RP); 27m. Juan Garro por Comba y Justo Giani por Sordo (N); Agustín Palavecino por Carrascal (RP); 34m. Guillermo Balzi por Castro (N); 41m. Leonardo Ponzio por De la Cruz (RP).

Amonestados: Zuculini y Enzo Pérez (RP) Julián Fernández (N).

Estadio: Coloso Bielsa (local Newell's).

Árbitro: Pablo Echavarría.

Gallardo: “No me mueve el piso, pero quiero ganar la Liga”

El entrenador de River fue claro en su deseo sobre el torneo y elogió a Álvarez: “Es un jugador de elite, tiene mucho potencial”.

 La Liga Profesional de Fútbol no es deuda sino un deseo. Marcelo Gallardo desactivó la metáfora, aunque al mismo tiempo dejó en claro cuál es su postura respecto del torneo local. Ese título de liga que aún no pudo festejar a pesar de ser el entrenador que más títulos ganó en la historia del club. “No tengo esa cuenta pendiente. Lo quiero ganar, tengo ese deseo. Pero no me mueve el piso”, aseguró luego del 4-1 ante Newell’s. “Un partido raro”, según el deté, “en el que fuimos contundentes sin tener el dominio de juego”. Una goleada necesaria...

Resúmenes pormenorizados al margen, conceptualmente Gallardo rescató que en la victoria en Rosario -necesaria para cumplir ese “deseo” llamado Liga- “fuimos contundentes, algo que a veces se nos reclama”. Aunque esto River lo logró a partir de los ingresos que decidió el Muñeco -para revitalizar el juego entraron Rollheiser, Simón y Palavecino- pero también gracias al cambio de mentalidad que tuvo el equipo: “Pudimos entender que si bajábamos un poquito íbamos a tener chances si éramos precisos”. Algo que en el primer tiempo su cuadro no había logrado precisamente por virtud del rival. “Newell’s jugó a un ritmo distinto al que habíamos observado en la previa, con una dinámica diferente.

Y, cuando se presenta así el partido, tenemos que jugarlo. Fue incómodo porque nunca pudimos tener le control en el primer tiempo producto de Newell’s nos puso en una situación difícil: llegaban a la segunda pelota más dinámicos que nosotros, que no recuperamos y no jugamos con precisión”, analizó el Muñeco. “Si bien no hubo situaciones del todo claras de parte del rival, sí se dieron aproximaciones”, añadió, advirtiendo que “los cambios nos dieron frescura y fuimos contundentes”.

Y entonces River goleó. Cuatro a uno. Con un Julián Álvarez implacable al que Gallardo definió como “un jugador de élite con mucho potencial” y al que le destacó -además de sus valencias técnicas- su “voluntad de seguir aprendiendo”. Sin embargo, el Muñeco también le dedicó algunas palabras a su futuro… eludiendo cualquier tipo de definición, de gesto, de mueca que permitiera semblantear qué pretende hacer cuando el 31 de diciembre finalice su contrato.

“No lo tengo resuelto. Estaré este tiempo con la cabeza ocupada armando rompecabezas para conformar el mejor equipo posible y tratar de ganar esta liga. La energía la tengo en todo lo que conté hasta ahora, trato de no pensar en fin de año porque me evito un gran desgaste mental. Me saca energías”.

Evaluación del partido contra Newell's: “Fue un partido raro más allá del resultado abultado. El desarrollo fue mucho más parejo, podría haberlo ganado cualquiera de los dos. Fuimos contundentes, a veces se nos reclama que, además dominio, no somos del todo contundentes. Hoy fuimos contundentes sin tener el dominio del juego en un partido que fue bastante vibrante y dinámico. Con aciertos y errores encontramos los goles”.

“Creo que fue un partido bastante dinámico. En el PT, Newell's nos hizo jugar a un ritmo distinto al que habíamos observado en la previa, con una dinámica diferente. Cuando se presenta así tenemos que jugar ese partido, fue incómodo porque nunca pudimos tener el control en el primer tiempo producto de que Newell's nos puso en una situación difícil, llegaban a la segunda pelota más dinámicos que nosotros y si bien no hubo situaciones del todo claras, hubo aproximaciones peligrosas.

Y cuando no tenemos el control, no recuperamos pelotas, no jugamos con precisión, y más allá de que arrancamos el partido con el pie derecho ganando, producto de esa intensidad generaron que cometiéramos errores. Y eso se nos presenta muchas veces como una oportunidad. Pudimos entender que si bajábamos un poquito, íbamos a tener chances si éramos precisos. Lo aprovechamos en el PT. Los cambios nos dieron frescura y fuimos contundentes”.

“Corregimos lo que creíamos que habíamos hecho mal en el primer tiempo. Sobre todo en esas desatenciones defensivas, donde llegábamos tarde, no teníamos precisión cuando recuperábamos la pelota salvo en el gol y alguna jugada más”.

Julián Álvarez: “Julián es un jugador que a nosotros nos llamó mucho la atención. Lo conozco de mucho más chico, le vimos un potencial enorme cuando lo subimos a Primera. Como todo proceso de un jugador joven, pasa por altibajos, nos pasó a todos en la carrera. Como cualquier ser humano de 18, 19 años que atraviesa una etapa de madurez. Va teniendo la posibilidad de ir creciendo, de ir golpeándose, de salir de los momentos bajos. Él es un jugador de elite, tiene mucho potencial.

¿Y cómo se mejora? Con la toma de riesgos: si no los toman, no pueden descubrir qué son capaces de hacer. Es el tomar riesgos, creer en que tienen esas capacidades para resolver situaciones que en el fútbol son cada vez más complejas. Se hace difícil en el fútbol argentino porque jugamos como vivimos en un país que es complejo vivir, a veces se quiere hacer creer que el fútbol es una especie de isla en el que a veces es difícil e insistimos en que los jugadores pueden tomar riesgos y acompañarlos en ese crecimiento. Hoy cada vez más en este fútbol, donde tenés que jugar con jugadores más jóvenes que demoran en madurar y hoy es mucho más lenta la maduración”.