Lo comunicó La Academia de Cine de España. El actor residía en Madrid. En 1985, la película La Historia Oficial, que protagonizó, ganó el Oscar
El reconocido actor Héctor Alterio falleció a los 96 años, según el comunicado que compartió su familia en donde confirmaron la lamentable pérdida del intérprete que, en su haber alcanzó más de 150 películas.
Según supo la Agencia Noticias Argentinas, el escrito con el que comunicaron el fallecimiento señaló que el artista transitó "una vida larga y plena dedicada a su familia y al arte, estando activo profesionalmente hasta el día de hoy".
Nacido en el barrio porteño de Chacarita, en 1929, Alterio renovó la escena teatral en una argentina que afrontaba los movimientos sociales y artísticos de los años 60', cuando ya con 20 años de trayectoria, el artista se impuso al cofundar la compañía Nuevo Teatro.
Más tarde, un salto al cine lo ubicó entre los intérpretes centrales del séptimo arte, incluso a nivel internacional, con roles inolvidables en películas como La Patagonia rebelde, La tregua, La historia oficial -ganadora del Oscar- Camila, El hijo de la novia y Plata quemada, entre muchos otros títulos que marcaron a décadas enteras.
El intérprete protagonizó "La Patagonia rebelde" en 1974, donde se ubicaba en el sur argentino, en el centro de los fusilamientos de obreros, luego de esto, y como muchos artistas de renombre, el artista debió exiliarse en España durante la dictadura cívico militar, en 1975, ya que recibió amenazas de muerte vinculadas a dicha participación, sin embargo aprovechó la estadía para consolidar su carrera en Europa.
Este lapso generó en el intérprete un importante abanico de apariciones televisivas, en la pantalla grande y sobre las tablas, donde cosechó premios como el Goya, aunque no se desligó de sus vínculos con Argentina.__IP__
Un título que le valió gran parte de su paso en la escena teatral fue "Como hace 300 años", estrenada en 1992, se basó en textos poéticos y estuvo acompañada por música en vivo, un unipersonal que giró por Argentina y España durante más de 25 años, con funciones registradas incluso entre 2018 y 2019, cuando Alterio ya pisaba los 90 años.
Pero la frase que hizo de esta figura un ícono nacional fue "La puta que vale la pena estar vivo", pronunciada en El lado oscuro del corazón, film dirigido por Eliseo Subiela y estrenado en 1992, un emblema que, con el paso del tiempo se dominio en uso popular.
Murió Ernesto Acher, el creador que expandió el universo de Les Luthiers
Arquitecto, músico y director, dejó una impronta singular al unir comedia y sonido académico en proyectos que marcaron época.
La muerte de Ernesto Acher a los 86 años cierra un capítulo fundamental de la música y el humor en Argentina, con proyección en todo el mundo hispanohablante. Arquitecto de formación, se destacó como músico humorista, compositor y director orquestal, con una mirada personal que combinó música clásica, jazz y comedia.
Acher se sumó a Les Luthiers en marzo de 1971 como reemplazo temporal de Marcos Mundstock en la lectura de textos y ejecución instrumental. Un año después, con el regreso de Mundstock, el grupo lo incorporó de manera estable como compositor, arreglador y multinstrumentista.
Durante su etapa en el conjunto, impulsó cambios estructurales relevantes:
Promoción del trabajo colectivo
Uso de equipos de amplificación
Inicio de la carrera discográfica mediante el vínculo con el sello Trova
Entre sus aportes más reconocidos figuran “Miss Lilly Higgins”, “Epopeya de los quince jinetes”, el poema sinfónico “Teresa y el Oso” y la “Cantata de Don Rodrigo”.
Sobre el escenario, interpretó personajes memorables como Don Rodrigo, el rey loco de “El rey enamorado”, y el niño de “La gallina dijo Eureka”. También participó en la creación de instrumentos no convencionales junto a Carlos Núñez Cortés y Carlos Iraldi, y diseñó a Antenor, el robot musical de “Muchas gracias de nada”.
Su dominio instrumental incluyó:
Clarinete
Piano
Instrumentos originales como el gom-horn y el yerbomatófono
A fines de 1986, dejó Les Luthiers. Siempre mantuvo reserva sobre los motivos y definió esa etapa como “un matrimonio múltiple”.
En 1988 fundó La Banda Elástica, integrada por referentes del jazz argentino como Carlos Costantini, Hugo Pierre, Enrique Varela, Jorge Navarro, Ricardo Lew, Juan Amaral y Enrique Zurdo Roizner. El debut se realizó en el Teatro Cervantes, seguido por temporadas en salas porteñas, tres discos editados y giras por Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay.
En 1991 impulsó “Juntos en concierto”, un cruce entre La Banda Elástica y la Camerata Bariloche, con funciones en el Teatro Opera y el Luna Park. El grupo se disolvió en 1993.
A partir de 2002, Acher residió en Chile. Allí dirigió la orquesta de la Universidad de Concepción y luego se estableció en Santiago y Linares. Durante siete años ejerció la docencia en la Universidad Diego Portales, con materias vinculadas a literatura, técnica narrativa e historia del arte.
En ese período desarrolló proyectos como:
“Homenaje a Piazzolla”
“Fantasía en concierto”
“La orquesta va al colegio”
“¿Acher en serio?”
Los repertorios incluyeron obras de Jobim, Schreker, Piazzolla y Richard Strauss.
Desde septiembre de 2016 retomó su actividad en Buenos Aires con propuestas unipersonales como “Humor, con Acher”, el ciclo radial “Los rincones de Acher” y “Veladas espeluznantes”. También fundó la Offside Chamber Orchestra, integrada por 23 músicos, y sostuvo colaboraciones con Jorge Navarro y Jorge de la Vega.
Su trayectoria dejó una huella profunda en la música y el humor, marcada por la experimentación artística, la amistad y una forma singular de entender el escenario.
Falleciò Peter Greene, el actor que encarnó a algunos de los villanos más memorables del cine de los 90
El actor estadounidense fue hallado sin vida en su departamento de Nueva York, dejando atrás una carrera marcada por personajes intensos, oscuros y profundamente humanos que lo convirtieron en un rostro inolvidable del cine de los años noventa.
Peter Greene, recordado por sus impactantes interpretaciones de villanos y criminales, murió este viernes a los 60 años luego de ser encontrado sin vida en su departamento del Lower East Side, en Nueva York. La noticia fue confirmada por su representante y gerente, Gregg Edwards, quien no precisó las causas del fallecimiento.
Según trascendió, el cuerpo del actor fue hallado luego de que se solicitara una visita médica al advertirse que la música sonaba de manera ininterrumpida durante más de 24 horas en el interior del departamento. Edwards, quien había hablado con Greene pocos días antes, lo despidió con palabras cargadas de afecto: “Nadie interpretó a un villano mejor que Peter”, aunque destacó que “también tenía un lado amable que la mayoría no veía y un corazón enorme”.
Greene alcanzó el reconocimiento internacional en 1994, cuando encarnó dos de los personajes más perturbadores y recordados del cine de esa década. En “Pulp Fiction”, de Quentin Tarantino, interpretó a Zed, un guardia de seguridad violento que quedó grabado en la memoria colectiva. Ese mismo año, fue Dorian Tyrell, el antagonista principal de “La Máscara”, enfrentándose al personaje de Jim Carrey y consolidando su lugar como el villano arquetípico de los 90.
Más allá de esos éxitos comerciales, su trabajo más celebrado por la crítica llegó con “Clean, Shaven” (1993), donde dio vida a un hombre con esquizofrenia acusado de asesinato. El New York Times elogió su actuación por su intensidad física y emocional, al señalar que Greene logró construir un personaje “convincente, angustiado y volátil”.
También dejó su marca en títulos emblemáticos como “The Usual Suspects”, donde interpretó a Redfoot, una pieza clave del engranaje criminal, y en “Training Day”, como el detective Jeff, integrante de la brigada corrupta liderada por Denzel Washington, protagonizando una de las escenas más recordadas del film.
Nacido el 8 de octubre de 1965 en Montclair, Nueva Jersey, Peter Greene comenzó su carrera actoral a los veinte años mientras vivía en Nueva York. A lo largo de los años 2000 y 2010 continuó activo en cine y televisión, alejándose de los grandes estudios pero sosteniendo una presencia constante en la industria.
Le sobreviven un hermano y una hermana, según confirmó su representante. Con su partida, el cine pierde a un actor capaz de habitar la oscuridad de sus personajes sin perder humanidad, un intérprete que convirtió a los villanos en figuras complejas y difíciles de olvidar.
Fuente: NA