06/05/2023

Carlos III del Reino Unido fue coronado como el nuevo rey de Gran Bretaña en una ceremonia suntuosa y llena de pompa en la Abadía de Westminster en Londres.


Carlos III del Reino Unido es coronado como nuevo rey en una ceremonia que marca un hito histórico para la nación británica. La suntuosa exhibición de pompa se llevó a cabo en la Abadía de Westminster en Londres, donde Carlos sucedió a su madre, la reina Isabel, convirtiéndose en el monarca británico de mayor edad en tener sobre su cabeza la corona de San Eduardo y sentarse en un trono del siglo XIV.


Más de 100 jefes de estado y dignatarios, incluyendo a la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, fueron testigos de la ceremonia, que ha sido escenario de todas las coronaciones del país desde Guillermo el Conquistador en 1066. La segunda esposa de Carlos, Camilla, también fue coronada como reina durante el evento de dos horas que intentó presentar una monarquía y una nación con visión de futuro.


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A pesar del entusiasmo del primer ministro británico, Rishi Sunak, la coronación se llevó a cabo en medio de una crisis del costo de vida y el escepticismo público, particularmente entre los jóvenes, sobre el papel y la relevancia de la monarquía y las dudas sobre sus finanzas.


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El evento, que tuvo una escala más pequeña que la organizada para la reina Isabel en 1953, contó con una variedad de insignias históricas, desde orbes dorados y espadas enjoyadas hasta un cetro que sostiene el diamante tallado transparente más grande del mundo. Después del servicio, Carlos y Camilla partirán en el Gold State Coach de cuatro toneladas que fue construido para Jorge III, regresando al Palacio de Buckingham en una procesión de kilómetro y medio y con 4.000 militares de 39 naciones en uniformes ceremoniales.


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La coronación también enfrentó protestas de los antimonárquicos, quienes montaron la mayor protesta republicana. Más de 11.000 policías estuvieron de servicio para sofocar cualquier eventual agitación.


El servicio contó con elementos que reconocerían los antepasados de Carlos hasta el rey Edgar en 973, pero también hubo nuevos elementos, como un himno compuesto por Andrew Lloyd Webber y un coro de gospel. Aunque no hubo un papel formal para el príncipe Harry, después de su pelea de alto perfil con su familia, ni para su hermano, el príncipe Andrés, quien se vio obligado a renunciar a sus deberes reales debido a su amistad con el difunto financiero estadounidense Jeffrey Epstein, condenado por agresiones sexuales.


Las celebraciones continuarán el domingo con fiestas en las calles en todo el país y un concierto en la casa del rey en el Castillo de Windsor, y el lunes, cuando miles de organizaciones participen en proyectos de voluntariado.


 


 


Fuente: Télam

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