Un nuevo hecho vandálico dejaría sin agua potable a miles de vecinos de la zona sur de Puerto Iguazú debido al daño ocasionado en una manguera especial de caucho flexible que une la cañería con el pontón flotante fondeado en el río Paraná.

Este acto irracional, en el que utilizaron un objeto contundente, cortante y punzante sobre la superficie del caño de 8 pulgadas de diámetro incidió en la producción debido a que afecta a una de las tres bombas de la balsa de extracción y alteraría  la provisión del líquido vital en las próximas horas.

Mientras operarios del Instituto Misionero de Agua y Saneamiento (IMAS) y de la empresa encargada de la obra de la toma del río Paraná están realizando las complejas tareas de reparación para reestablecer el sistema, se anticipó que en las próximas horas el organismo provincial realizará una denuncia policial.

Desde el IMAS llaman a la conciencia social y repudian este tipo de prácticas que no solo afecta a miles de usuarios y remite altos costos por las reposiciones, sino que además contrasta con las millonarias inversiones que se están realizando en Iguazú para concretar el diseño que ya tiene un evidente avance y que garantizará la provisión del líquido vital durante los próximos 20 años.

Fuente: Prensa I.M.A.S. Instituto Misionero de Agua y Saneamiento