Tras el robo en Córdoba que la dejó sin valiosas pertenencias, la misionera hace un llamado a la solidaridad. Agradecida por el apoyo de la comunidad, comparte su CBU y se compromete a ayudar a otros ciclistas si logra recuperar lo que le fue hurtado.
Mariela Delgado, la ciclista misionera que recientemente participó en la Clásica San Francisco-Miramar, sigue a la espera de respuestas tras el robo que sufrió en Villa María, Córdoba. A pesar de la conmoción provocada por el incidente, Mariela decidió compartir su experiencia y hacer un llamado a la solidaridad mientras continúa su búsqueda de justicia.
Mariela, con tres Juegos Paralímpicos en su historia el último en París este año, se encontraba en Villa María por motivos familiares tras su destacada actuación en la competencia del 23 y 24 de noviembre. Alquiló un departamento temporal en el centro de la ciudad, confiando en la buena reputación del lugar según los comentarios de anfitriones anteriores. Sin embargo, la mañana del 27 de noviembre, al despertar, se encontró con un vacío desolador en su sala y baño: le habían robado mientras dormía.
"Me robaron las ruedas de carbono Vision 45 SL, zapatillas Shimano, Garmin 530, un MacBook Air, y hasta comida de la heladera", comentó Mariela, quien no solo lamenta la pérdida material, sino también el impacto emocional que ha tenido que afrontar. A pesar de haber hecho la denuncia en la Fiscalía de Villa María, hasta el momento no ha recibido información sobre el avance de la investigación ni sobre la revisión de las cámaras de seguridad que podrían arrojar luz sobre el hecho.
La ciclista expresó su frustración por la falta de respuestas: "Aún no aparece nada y ni rastros de lo que me robaron. Nadie escuchó nada, ni vieron nada. Es una situación angustiante". Sin embargo, a pesar de la adversidad, Mariela se siente agradecida por el apoyo de la comunidad ciclista y de sus seres queridos. "La movilización en redes para difundir lo que me pasó ha sido increíble. Agradezco a todos los que se han acercado para ayudarme", agregó con gratitud.
En su mensaje, Mariela también propuso una cadena de solidaridad. "Si con lo que me aportan puedo comprar lo que necesito para seguir entrenando, me comprometo a donar a algún ciclista en desarrollo si alguna vez recupero mis cosas", afirmó, resaltando que hay muchas maneras de ayudar más allá del dinero. "La realidad es que, aunque no quiero que esto quede impune, debo seguir adelante", subrayó.
Para quienes deseen colaborar con Mariela en la reposición de sus pertenencias, compartió su CBU: 0000003100070955658188. Su alias de Mercado Pago es anota.anota.cuota.mp. "Sé que todos estamos atravesando una situación difícil así que solo pido ayuda a quien pueda", agregó.
La posadeña continúa esperando que aparezca algo de lo robado, pero su determinación por enfrentar este obstáculo es inquebrantable. "Dicen que lo que no te mata te fortalece, y aquí estamos", concluyó.
La comunidad ciclista y la sociedad en general siguen pendientes de esta situación, esperando que la justicia se haga presente y que Mariela pueda recuperar lo que con tanto esfuerzo ha logrado, mientras se fortalece una cadena de solidaridad entre quienes la apoyan.
Por Roxana Ramírez
Fuente: El Territorio