Las ventas minoristas cayeron en julio 27,7% a nivel país en un contexto en el que en muchas ciudades del interior los comercios volvieron a atender al público con normalidad, mientras que en el área metropolitana de la Ciudad de Buenos Aires (AMBA) las operaciones retrocedieron 36,3% respecto a igual mes de 2019, según un informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

“Las ventas, medidas en cantidades, cayeron un 27,7% anual, incluyendo tanto la modalidad online como en los locales físicos. Con muchas ciudades del interior trabajando con mayor normalidad, la baja en la región AMBA llegó al 36,3% mientras que en el resto del país fue de 13,7%”, precisó la entidad pyme en un comunicado.

En julio, sin considerar las actividades esenciales -entre las que se encuentran los rubros alimentos y bebidas, farmacias y ferreterías- la retracción en las ventas hubiese trepado al 33,8%.

“Todos los rubros medidos finalizaron en baja afectados por la disminución en los ingresos, la menor circulación de gente en las calles, y las menores posibilidades de empleo en un contexto donde muchos negocios están cerrando sus puertas al no poder sostener sus gastos fijos. En los primeros siete meses del año, el comercio minorista pyme acumula así una caída anual de 31,6% frente a iguales meses del año pasado”, precisó CAME.

En julio, la mayor retracción en las ventas se sintió en el AMBA, donde declinaron 38% porque las restricciones y controles a junio pasado, junto con un aumento a través de sistemas online o de billetera virtual, para evitar el uso de dinero físico.

Vinos argentinos se convierten en alcohol en gel en Brasil

El cierre de las fronteras por el coronavirus modificó la vida diaria de los habitantes de las localidades de la denominada triple frontera serca con Brasil y Argentina, en el Norte provincial. Los ciudadanos de Bernardo de Irigoyen (Misiones), Dionísio Cerqueira (Santa Catarina) y Barracao (Paraná) tenían un día a día que prácticamente no entendía de jurisdicciones y límites, pero que mutó con la presencia de controles de las fuerzas policiales de uno y otro lado.  

Sin embargo, como informó este medio en diversas oportunidades, lo que siguió su curso fue el contrabando, sobre todo el de bebidas alcohólicas, y especialmente el vino de primeras marcas.

Son diversas las incautaciones hechas por las autoridades brasileñas de los productos ingresados al país de forma clandestina. Incluso algunos medios locales señalaron que se llegaron a hacer cuatro procedimientos en un mismo día. Todo se cruza por los 30 kilómetros que hay hasta San Antonio y que son muy difíciles de controlar en su totalidad. Chacras, montes y los denominados “piques” son aprovechados al máximo por los contrabandistas, que multiplican sus ganancias en reales. 

Números y destino

Según consignaron autoridades de la zona, en lo que va del año fueron secuestradas 35.000 botellas de bebidas alcohólicas. El producto y los vehículos en los que eran transportada la mercadería ascienden a unos 10 millones de reales, según detalló al sitio Jornal Da Fronteira Valter Durigon, delegado del Departamento Especial de Ingresos Federales de Brasil, órgano conocido como Receita Federal.

Los procedimientos los hicieron la Policía Militar, el Batallón de Frontera, la  Policía Federal, y Policía Rodoviaria Federal, entre otros órganos, en las localidades mencionadas, además de Santo Antonio (límite con San Antonio) y Bom Jesús (Paraná), que queda a unos 13 kilómetros de Bernardo de Irigoyen.  

El delegado también detalló la utilidad que se les da a esos productos en este contexto de pandemia, señalando que la mayor parte termina en el sector de Salud del país: “A partir de la bebida alcohólica es extraído el alcohol en gel, el cual después es destinado principalmente a los órganos públicos, que necesitan constantemente suplir sus necesidades para la protección y prevención del coronavirus”.

El producto es realizado en la Universidad Estatal de Paraná, en la localidad de Guarapuava.

Otra parte del producto es subastado, tal y como lo contemplan las leyes del vecino país. Actualmente se hace de manera online y pueden participar cualquier persona física o jurídica.

Últimos procedimientos

Generalmente son brasileños los atrapados con los cargamentos de bebidas ya cargadas en vehículos particulares, aunque en los últimos días se registraron procedimientos que involucraron a jóvenes que ingresaron al extranjero desde las localidades misioneras.

El sábado cuatro argentinos - se presume que todos misioneros - fueron sorprendidos en plena maniobra de contrabando de champán a la luz del día. El procedimiento fue realizado cerca de las 17.30 por Policía Militar de Santo Antonio do Sudoeste, en el barrio Villa Nova de esa localidad.

Según informaron las autoridades policiales de ese país, una comisión realizaba patrullajes cuando observaron al grupo en plena carga de las cajas del espumante, por lo que decidieron abordarlos.

Dos de los involucrados huyeron hasta el río San Antonio y volvieron a la Argentina, mientras que otros dos fueron atrapados en flagrante. De todas formas no trascendieron sus identidades y hasta ayer no se sabía cual es su situación judicial actual.

En total, los uniformados secuestraron nueve cajas y 54 botellas, se consignó.

El último viernes, en tanto, un adolescente, también argentino, fue detenido transportando cuatro  cajas de vino por una calle de la misma localidad.

El procedimiento se hizo cerca del mediodía, según informaron los medios locales.

Fuente: Télam - El Territorio